Una dulce espera

Hace mas de tres años por estas fechas le escribí una carta a Lucia, tu hermana. Ahora a falta de menos de dos meses para que vengas de la luz me ha dado por pensar en ti. Tu llegada coincidirá con un calor parecido al que hacía cuando tu padre o yo llegamos al mundo, y quizás si te retrasas lo hagas en el mismo mes de Agosto. El caso es que todos nos estamos preparando para recibirte, y no se porque esta vez me siento muy removido.

Estás a punto de llegar y todo está más preparado que hace tres años. A tus padres ya no les pilla de sorpresa, porque tienen el protocolo de la experiencia de Lucia. Tus abuelos, están mucho mas serenos que por aquel entonces, e incluso tus tíos abuelos te esperan de una manera diferente a como esperaban a tu hermanita. Parece que el mas nervioso soy yo pequeña. Cuando llegó Lucía a nuestras vidas mis circunstancias personales eran diferentes y mi forma de sentir también. Ahora mi corazón, a parte de dar 46 pulsaciones en reposo, ha decidido sentir. El atleta se ha humanizado, y mi patata no solo funciona como una maquina perfecta si no que ahora siente con la misma fuerza que bombea. Bendita vida que me ha suavizado tanto, que ahora me coloca en una situación de entrañable expectación.

Poco se habla de la magia de la espera, pero en estos días está muy presente en la familia. Hay algo muy parecido al sentimiento que se genera cuando alguien va a dejarnos en el momento de la muerte. Existe como una especie de sinergia invisible que nos une a través de unos lazos invisibles para prepararnos en  estos momentos.

Quizás lo que me ocurra es que noto como ese portal por donde entramos y salimos de la existencia se está abriendo para ti. El caso es que llegas a nuestras vidas, y lo haces siendo un milagro. Todos lo recién nacidos lo sois. No te voy a engañar. Por el camino perderás parte de esa luz que traes, y en algún momento comenzarás a vibrar en un sensación de separación contraria a lo que sentimos en nuestros primeros años de vida. Mas no temas. La vida es un continuo regresar a casa y a la esencia. Deberás pasar por esa experiencia para darte cuenta. Pero si algo tengo claro, es que en esta carta debo transmitirte algunos mensajes:

Primero. Eres fruto del amor de tus padres. Pase lo que pase, nunca lo olvides.

Segundo. Representas la esperanza de una nueva generación de seres humanos. Abandera las causas mas nobles Alicia. El mundo necesita de valientes que hagan tambalear todos aquellos cimientos sin raíz en el amor.

Tercero. Traes una pureza y alegría que nadie podrá manipular ni falsear. Se fuerte mi niña.

Cuarto. Pase lo que pase yo estaré aquí siendo tu tío. Cuenta conmigo para lo que necesites y apóyate en mi cada vez que quieras o te sientas perdida. Si algo se de la vida es que no es fácil y que en muchos momentos necesitamos guía.

Esta carta llega a su fin. Te pido por favor no olvides nunca estos cuatro mensajes. Solo decirte una cosa mas, en poco tiempo podré sostenerte en mis brazos, y ver tu cara, y solo por esos instantes merece la pena esta hermosa espera

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